EDUCARTE EN TU RECUPERACIÓN, ES EL PRIMER PASO.
Al llegar una persona con dolor de cuello a la Clínica, lo primero que hacemos es valorar y esta valoración comienza preguntándole al paciente qué ha pasado; por qué piensa que le duele y qué ha hecho hasta ahora para aliviarlo.
Ocurre que tenemos que explicar lo que NO debes hacer cuando tienes cervicalgia.
Estamos acostumbrados a que nos digan que tenemos que hacer cuando somos diagnosticados de dolor cervical o simplemente miramos por las redes sociales para buscar solución a nuestro problema (Como estás haciendo ahora).
Es por ello que en este caso vamos a decirte algunas claves que no deberías hacer si sufres de cervicalgia o dolor de cuello.
- Inmovilizar el cuello, mediante un collarín u otro tipo de mecanismo, ya que esto va hacer que perdamos movilidad y debilitemos más aún la musculatura, lo que nos llevará a aumentar probablemente nuestro dolor a largo plazo.
- Tomar medicamentos, no deberías tomar antinflamatorios o cualquier otro tipo de medicamento a no ser que lo indique un profesional.
- No mover el cuello, modificar la forma habitual de mover el cuello implica una disminución del rango de movimiento lo que generará mayor sensación de incomodidad, restricción de movilidad y enmascara el dolor, por lo que dentro de tus posibilidades intenta actuar dentro de la normalidad.
- Seguir con los mismos hábitos. Buscar la raíz del problema es dificil al igual que cambiar algunos hábitos con respecto al trabajo, el móvil u ordenador, nuestras actividades de la vida diaria son pequeñas acciones que participan en lo que nos ocurre.
Es importante que seas consciente de lo que haces en tu día a día ya que como pasas la gran parte de tu tiempo determinará la solución a tus problemas, si no sabes por dónde empezar puedes consultarnos para recibir tratamiento.
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